“De pie y sin bajar los brazos”

Una de las jóvenes pasa el mate. El gusto da cuenta que la cebadora es de fuste. Las rosquitas no se quedan atrás, ni en gusto, ni en pinta. Es el marco ideal para conversar. Y eso ocurrió. La otra cara visitó a Alejandro Veas, coordinador de Barrios de Pie y Libres del Sur en la zona sudoeste, para seguir sumando testimonios de vecinos y vecinas que todos los días quieren hacer algo mejor por el barrio.

Alejandro contó que llegó a la agrupación hace cuatro años, buscando ser parte de la cooperativa porque se había quedado sin trabajo, debido a un accidente laboral en el cual perdió falanges de su mano derecha.  Decidió anotarse para percibir el Salario Social Complementario, y empezó a trabajar en una cuadrilla de limpieza en el barrio Las Flores. Pero, junto a sus compañeros, advirtió que los encargados le retenían parte de sus sueldos y a su vez les quitaban la oportunidad de demostrar las cosas buenas que querían hacer por el barrio.

Ante esta situación horrible, Veas decidió hablar con la organización, la cual decidió que Alejandro tomara el lugar de los encargados.

Ronda de mates de por medio, Veas detalló cada uno de los sucesos que vivió. Como encargado, Veas abrió una copa de leche y se hizo cargo de sus compañeros, que realmente querían trabajar, y sumó más personas. Según recuerda, se trató de una etapa muy difícil, porque no sabían nada. Ni siquiera hablar con la gente. Sin embargo, fueron aprendiendo, porque valió más la responsabilidad y las ganas de trabajar. Los frutos saltan a la vista: a los 25 compañeros que arrancaron con él, se suman 15 que están en otra copa de leche.

Alejandro remarca una y otra vez que lo único que quieren es seguir trabajando, haciendo cosas por el barrio: desde mantenerlo limpio hasta ayudar a que la gente pueda recibir su merienda o lo que necesite. Él sabe que hay cosas que no pueden resolver, pero destaca que entre todos se la rebuscan para encontrar solución a los problemas de los vecinos y las vecinas. También destaca que las necesidades de las personas no siempre son materiales. A veces simplemente necesitan los escuchen, que los guíen y aconsejen.

Para Alejandro es fundamental mantener la solidaridad. Dice que él fue una de esas personas que pasó por necesidades y malas épocas, pero la solidaridad de Barrios de Pie le abrió las puertas y él aspira a que otros puedan pasar por su misma experiencia: vivir y ayudar a otras personas.

Un lugar, muchas opciones

La copa de leche que Alejandro tiene a cargo se encuentra en Pasaje 521 Nº6984. En ese mismo lugar están las cuadrillas que hacen las tareas de limpieza y recorren todo el barrio, incluidos los contenedores, ya que pasan muy pocos camiones municipales a vaciarlos.

En el mismo lugar están las chicas de copa de leche que trabajan lunes y martes entregando la merienda a las 16. Son cuatro y se le suman cuatro más del área de salud, en la cual chequean el peso y la nutrición de los niños y niñas. Además, pasan casa por casa a tomarle la presión a vecinos y vecinas, y le llevan la merienda aquellos abuelos que no pueden acercarse a la copa de leche.

Los fines de semana, a las 17, realizan una kermesse en Moreno y Battle Ordoñez donde las compañeras venden bizcochuelos, panes caseros, rosquitas y pre pizzas que ellas mismas elaboran y que ayudan a sustentar las copas de leche. Las actividades de Barrio de Pie incluyen (¡además!) ayuda escolar y actividades artísticas para los más chicos, y espacio de contención para mujeres víctimas de violencia de género.

Anhelos para el año que comienza

El coordinador de Barrios de Pie tiene un deseo para el 2020: que mejore la situación para todos. En los últimos años, dice, la cantidad de chicos que buscan la merienda creció de 50 a 140. Desea también que se profundice el trabajo solidario entre todos los vecinos, y que no miren para un costado.

Este año que comienza estarán trabajando en base al programa Nueva Oportunidad, enfocándose más en los jóvenes, tanto para trabajar los problemas de consumo como los de violencia de género o maltrato en caso de las chicas.